Yo lo he visto con una actitud presidencial que tira de espaldas, como se veía a Kennedy frente a Nixon, igual o más. Una clase y una disposición impecables.
Me quedo quizá con el momento del que nadie va a hablar. El momento final en el que Obama va directamente a felicitar al candidado republicano y luego al moderador . Más tarde se dirige a su esposa, y juntos caminan hacia el otro extremo del plató para saludar a la esposa de McCain.
La cercanía, calma y la educación que ha mostrado en esta escena me ha hecho verlo claramente como presidente de los Estados Unidos.
Sin embargo, y para mi sorpresa, no todo el mundo piensa lo mismo por aquí.
Se ha hablado muchísimo de la crisis económica, de Irak, de Afganistán y de Rusia.
Mis amigos americanos opinan que McCain se ha defendido mucho mejor en política internacional, mientras que Obama ha ganado en defensa de la política interior, apostando por educación en primer término. No obstante, el moderador ha hecho girar el debate más en torno al primer tema y ha desplazado la política social fuera del debate, dejando la piedra angular de la política de Obama fuera de juego. Así, el análisis de la política nacional ha quedado únicamente centrado en cómo solventar la crisis económica.
Mi amiga rusa, Aygul, y yo opinamos que la política exterior de McCain se basa aún en términos de la guerra fría (sobre todo a la hora de afrontar el conflicto Rusia-Georgia, donde el candidado republicano considera que EEUU debería mediar y ve aún en Rusia un enemigo más que un aliado) y en reforzar las tropas en Irak, puntos en los que estamos completamente en contra, aunque aquí se ven, por alguna razón, positivos. Especialmente por los soldados y ex soldados, que idolatran a McCain por su presencia en Irak en 2003.
La política exterior de Obama se basa en reforzar las alianzas, desplazar las tropas a Afganistán y retirar las tropas de Irak. En lo que respecta a reforzar estas relaciones, a nosotros nos atañe específicamente este punto debatido en mitad del debate (vía El País):
McCain también se queda con la anécdota del debate, porque el senador se ha visto francamente en un aprieto para decir Ahmadinejad varias veces durante el debate.
Para finalizar, creo que los últimos minutos de debate definen qué es lo que cada uno quiere y defiende como futuro presidente:
04:37 McCain se despide recordando sus heridas de guerra y su experiencia en estrategia internacional.
Uno lucha por recuperar el sueño americano del país donde todo es posible.
El otro lucha por seguir vengando y demostrando al resto de los países que no se puede desafiar a los EEUU sin consecuencias.
Los dos tienen muchos aliados a su favor.
No sé si lo habréis visto, pero ¿qué opináis vosotros?
De todos modos, aún quedan dos debates. El siguiente, además, será en St.Louis, muy cerca de donde yo estoy.
Así que como decía Edward R. Murrow, buenas noches y buena suerte.
Que hasta enero, que son las elecciones, todavía queda.
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